Muchas veces en los artículos relacionados al mundo de las inversiones nos topamos con menciones a estos dos animales que no necesariamente sabemos a qué se refieren ni apuntan. Pues bien, ambos términos se usan ampliamente para ejemplificar el comportamiento de los mercados financieros.
El toro: mercado con tendencia alcista
Hablamos de un bull market cuando vemos una tendencia alcista en el precio de los activos. Esto generalmente se produce en un contexto económico favorable, es decir, cuando el empleo y la actividad son altos y la economía en general se muestra sólida.
Ahora, ¿qué tiene que ver un toro con todo esto? La explicación está en la forma en que los toros atacan a sus oponentes, usando sus cuernos desde abajo hacia arriba para levantarlos. Así, para el mercado financiero, el toro representa la euforia, el éxito y los pronósticos alentadores.
El oso: mercado con tendencia a la baja
Por otro lado, un bear market se refiere a la tendencia contraria, es decir, escenarios con mercados bursátiles a la baja donde existe alta incertidumbre y creciente desconfianza. Este mercado puede presentarse en un contexto de una potencial crisis económica, frente a una disminución de la actividad, un aumento del desempleo o al colapso de un ciclo económico positivo.
El mundo financiero representa este tipo de mercados con la figura de un oso, ¿por qué? Bueno, al igual que para el caso del toro, hace referencia a la forma en que un oso ataca a su enemigo. Ante una amenaza, los osos se paran en sus patas traseras para verse más grandes, corpulentos y así incitar el miedo en su oponente. A su vez, utilizan sus patas y garras delanteras para tirar zarpazos a su oponente, reducirlo y botarlo al suelo.
Así, ambos términos se usan para describir tanto mercados financieros como el comportamiento y sentimientos de inversionistas. Ahora vale la pena preguntarnos: ¿qué es aconsejable hacer cuando nos enfrentamos a estos escenarios ejemplificados con estos dos animales?:
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Ante un bull market, lo ideal para un inversionista sería tomar ventaja de la tendencia al alza que presentan los precios. Para esto debería comprar activos al principio del ciclo y venderlos cuando hayan alcanzado su máximo.
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En el caso de un bear market, la probabilidad de perder es mayor ya que los activos irán perdiendo valor día tras día. Aquí lo más seguro sería comprar instrumentos más seguros, como los de renta fija.
¿Cuál es mi horizonte de inversión?
Sin embargo, no todo es así de perfecto. No hay forma de saber con exactitud cuándo comienza un ciclo y termina el otro. De hecho, es probable que tengamos un periodo donde coexistan ambos. Dado esto, es importante considerar nuestro horizonte de inversión a la hora de tomar nuestras decisiones.
Por ejemplo, si estás pensando en invertir para mejorar tu jubilación en veinte o treinta años más, lo más recomendable sería exponerse a estos ciclos invirtiendo en un portafolio de largo plazo, sin hacer cambios cuando te enfrentas a un bear market, ya que es muy difícil identificar los máximos o mínimos y por lo tanto acertar a cada movimiento.
Por otro lado, si es que estás pensando en invertir tus ahorros para usarlos en un futuro próximo, por ejemplo, para poner parte del pie para una vivienda, tu horizonte de inversión es de corto plazo y probablemente no alcancemos a recuperarnos en caso de una pérdida o un bear market o a capitalizar la ganancia en caso de un bull market. De este modo, quizás lo mejor sea exponerte lo menos posible a estos animales y optar por instrumentos más seguros.
Como vemos, no es un mundo de decisiones fáciles. Existen muchas variables que debemos considerar a la hora de decidir cómo invertiremos nuestros ahorros. Lo único cierto es que a medida que tengamos más y mejor información o nos asesoremos con expertos, mejor serán nuestras decisiones de inversión. Hoy aprendimos que existen dos animales en el mundo de las inversiones que marcan su tendencia, los cuales pueden ser nuestros poderosos aliados si aprendemos a conocerlos y a lidiar con ellos.
Recuerda que siempre puedes contactar a tu asesor para resolver preguntas y revisar tus inversiones. Si no eres cliente, puedes crear tu cuenta de manera rápida, fácil y 100% digital.